Nada los detiene. Sin cascos, pero con una alta dosis de riesgo, cientos de jóvenes tucumanos se juegan la vida día a día en las picadas ilegales. Y desde hace tiempo que los vecinos de Gobernador Garmendia, localidad ubicada a 93 kilómetros al noreste de la capital, piden control de estas carreras que se hacen en la ruta 336. Pero no obtienen respuestas.
El viernes pasado, al menos tres jóvenes resultaron heridos luego de chocar sus motocicletas mientras participaban de las picadas sobre la 336. Y uno de los presentes logró filmar el momento exacto en el que se produce el impacto en cadena.
De acuerdo a lo relatado por algunos testigos, un gran número de jóvenes de la zona (incluyendo menores de edad), protagonizaban la improvisada carrera cuando dos motos chocaron entre sí.
Mientras algunos "espectadores" intentaban ayudar a los heridos en medio de la ruta, una tercera moto impactó contra las rodados que habían quedado tiradas y también a quienes ayudaban a los del primer accidente.
Luego de los incidentes, el joven que filmaba salió corriendo y se subió a la parte trasera de una moto, mientras le repetía al conductor que se fueran de allí, ante la inminente llegada de personal policial y de emergencias.